jueves, 8 de marzo de 2012

Va por ellas

8 de Marzo, día internacional de la mujer, y por ello quisiera dedicar esta entrada a ellas, a las mujeres chinas. Poderosas y humildes, atrevidas y recatadas, modernas y tradicionales, tímidas e impulsivas, en los tiempos que corren no es fácil hacer un retrato general. Cierto que existen algunos tópicos que afectan a gran parte de ellas, pero la mayoría se han quedado obsoletos y no se corresponden con lo que uno encuentra, al menos en las nuevas generaciones. Con todo ello, si que es posible señalar ciertos tipos de féminas, características de este país, cuyos rasgos son fáciles de detectar y que paso a analizar a continuación.



La madre tigre (虎妈妈, hǔ mā mā): Este apelativo hace referencia a la madre, generalmente perteneciente a la clase media-alta, que se empeña en educar a sus hijos con mano dura, de la forma más disciplinada posible, exigiéndoles sacrificio y entrega constante, mostrando un afecto prácticamente nulo hacia ellos. Para ellas, aprender a tocar el violín o el piano es una obligación, no dejan a sus críos asistir a fiestas de cumpleaños, y consideran sus juguetes un estorbo en su camino al éxito, entre otros medios educativos. Este controvertido estilo maternal se refleja en el libro de la profesora, hija de chinos de Filipinas, Amy Chua, “Himno de la batalla de la madre tigre”, publicado el año pasado, donde describe sus motivos y razones para someter a sus hijas a tan estricto estilo de vida.


Amy y sus hijas, predicando con el ejemplo

La amante: En un país donde el concubinato era considerado algo, no solo normal, sino motivo de admiración, hasta el siglo pasado, no es de extrañar que las relaciones a tres bandas proliferen. En China hay dos categorías de amantes. Por un lado, la èr nǎi (二奶), literalmente “segunda leche”, que es casi como una segunda esposa para el adultero de turno, haciéndose éste cargo de sus costes de vida, así como la educación y mantenimiento de sus hijos, si ésta los tuviera. Suele ser, por tanto, una situación de infidelidad duradera, aunque el hombre no se sienta en ningún momento culpable ni lo mantenga en secreto. Para él es un símbolo de poder y estatus, y no se cortan un pelo a la hora de mostrarlas en cenas o reuniones de negocios.

Otro término casi sinónimo es el de xiǎosān (小三), literalmente “pequeño tres”. La principal diferencia con la anterior, por lo que he leído, es que esta última se entremete más en la relación, llevando a cabo maniobras de acoso y derribo, con tal de ocupar el lugar de la legítima esposa. Por su parte, la “ernai” no ve nada malo ser la segunda en discordia, no le preocupa el estatus, mientras no le falte el sustento material.



La “pequeña secretaria” (xiǎo mì ,小蜜): Literalmente significa “pequeña miel”. Son chavalas jóvenes, atractivas, aunque con el intelecto propio de una lombriz, que son también consideradas amantes, pero no llegan al nivel y caché de las “ernai”, en el sentido de que el infiel que acompaña no se hace cargo alguno de sus gastos de manutención. Como mucho, algún regalito de vez en cuando (pequeñas baratijas, ropa interior, complementos, etc). Hacen más que nada una función meramente decorativa, ideales para llevarlas a fiestas y saraos varios como si fuera un trofeo. Su interacción suele reducirse a reirle las gracias al maromo que le paga las copas, aunque la trate como a un trapo.



La entrometida (xiǎojiǎo zhēnjī du, 小脚侦缉队): La traducción literal es algo así “comité de investigación de pies pequeños”. Son mujeres mayores que, durante los tiempos de la Revolución Cultural tuvieron un rol de informadoras del gobierno en su comunidad, y que hoy día pasan el tiempo reunidas con otras viejas camaradas en el patio de vecinos, cotilleando y entrometiéndose en la vida del resto del vecindario. Es, más o menos, el equivalente a la “maruja” española.



Ni que decir tiene que no es mi intención dar la imagen equivocada del género femenino en China. Por supuesto, solo una pequeña proporción de mujeres encajan en estos arquetipos que he comentado. La realidad es tan sumamente compleja que haría falta más de una enciclopedia para hacer una clasificación medianamente precisa. En mi opinión, si tuviera que dar una valoración personal sobre las chicas chinas, de acuerdo con mi experiencia, diría que son por lo general tradicionales, le dan mucha importancia a la opinión de sus padres, los cuales dirigen sus destinos, y sienten curiosidad pero a la vez recelo por los extranjeros. Pasan su juventud obsesionadas con la idea de casarse, aunque no son para nada tan sumisas como las pintan. Le dan mucha importancia a lo material, y consideran que su hombre ideal tiene que ser capaz de garantizarles una casa y un buen estatus económico en el futuro. Por lo general, son tímidas y les cuesta expresar lo que opinan o sienten de manera clara. Pero como digo, cuanto más tiempo llevo aquí, más excepciones voy encontrando, que tiran por tierra todas mis concepciones anteriores.

Sean como sean, y de dónde sean, ¡felicidades a todas ellas!

mujer- 女人 (nǚrén)
chica- 女孩 (nǚhái)
señora- 夫人 (fūren)
señorita- 小姐 ( xiǎojie)(Cuidado, porque esto también puede significar "prostituta")
esposa- 妻子 (qīzi), 太太 (tàitai)


Un hombre tiene la edad de la mujer a la que ama.

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